capitulo 85 (siento la tardanza y encima esta muy cortito)

Las  lagrimas comenzaron a desbordarse por mis ojos, es que simplemente no podía hacerme creer que (tu nombre) ya no estaba…que jamás volvería.

- te necesito… ¿por qué te has ido?...yo no…- cubrí mi cara con mis manos, me sentía mal…

¿Por qué no pudo despedirse de mí? ¿Por qué Dios no dejo que la tuviera?

La lluvia comenzó a caer. No quise moverme de ahí, quería quedarme con mi angelito, quería estar con ella. No tenía palabras que decirle, solo me quede sentado ahí.

- ¿Bill?

Di un salto al escuchar mi nombre pero no me moví de ahí.

- no puedes quedarte todo el tiempo aquí.- tomo mi hombro y se hincó a mi lado.

Le mire, el me miraba serio y después miro la tumba. Frotó mi hombro.

- vamos, Bill te he traído un abrigo.- me lo mostró. De este caían algunas gotitas de lluvia.

- no la quiero…

- hombre, que pescaras una enfermedad.

- Tom, no la quiero…- quitó el abrigo de mi vista y suspiro pesado.

- hermano, aunque nos duela, ella se ha ido, no hay poder humano que le regrese.

Comencé a respirar entrecortado, sentí mis ojos llenarse de lagrimas.

- lo siento, Bill no quise hacerte sentir mal.

Me levante, camine lejos de Tom, a las bancas que estaban frente a ese jardín. Tom me miro y al tiro se levanto y se acerco.

- vamos, bill.- se paro frente a mí. – tienes que ir a casa, mama está preocupada.

- desde cuando a ti te importa mama.

- siempre me ha importado, Bill. No seas marica y regresa, tu hija te necesita.

- yo no la necesito…

- ¿Qué mierda? Bill, tú la amas.

- no la quiero ¡no la quiero! ¡Déjame solo!- Tom negó y aventó la chamarra a un lado mío.

- ¡¿dime por qué eres así, Bill?! Es que yo ya no te entiendo.

- no soy de otra forma, Tom.

- Bill, dime que no quieres a Yosai ¡dímelo!

- yo ya no la quiero… ¡ella tiene la culpa de todo!- abrió la boca y sus ojos mostraron sorpresa.

- ¿eres imbécil? Es una bebe ¡ella no tiene la culpa de nada! ¿Sabes que es lo que más odio de ti? ¡Que siempre intentes buscar a un culpable de todo!

- ¡no es verdad!

- ¿Por qué no te miras en un espejo, Bill? Porque no te pones a pensar que el único culpable ¡eres tú!

Le mire, no sabía que decirle, no sabía cómo reaccionar ante esas palabras…de pronto recordé

“Te vas a quedar con las ganas de decirle lo mucho que la quieres, te vas a quedar con las ganas de abrazarla y mirarla a los ojos, ¡de mostrarle tu cariño! Solo la quieres ver morir sola, porque que yo sepa, tom se preocupa más por ella que tu…”

Tom me miro, un poco confundido al parecer. Ladeo la cabeza y al saber que yo no hablaría, negó enojado y se marcho.

Me puse a pensar. Tal vez eso era lo que yo quería, tal vez quería quedarme yo solo, sin nadie más. Tal vez, Tom se preocupaba mas por (Tu nombre) que yo. Y no solo de (tu nombre), sino también de Yosai…de mi familia…

Tome mi abrigo y corrí a casa, fuera de la lluvia.

Abrí la puerta, mire a todas partes en busca de alguien, escuche ruidos en la cocina, como susurros. Entonces me acerque. Gordon estaba tomando a mama por la cintura, los dos sonreían…parecían quererse mucho…

Mama soltó una leve carcajada y se dio la vuelta para mirar a Gordon. Ellos se acercaban cada vez más. Negué y decidí interrumpir antes de que sus labios se juntaran con los del contrario.

- ¡¿Cómo pueden ser así?!- se separaron de golpe, Gordon abrazo a mama y los dos me miraron.

- ¿Qué pasa, Billy?- pregunto mama, sonriendo.

- mi angelito se ha ido…y ustedes se comportan ¡como si no hubiera pasado nada!

Mama miro a Gordon confundida, Gordon también la miraba a ella. Gordon soltó a mamá y se acerco a mí.

- Bill, entiende que no podemos hacer nada para que regrese, no podemos dejar de vivir.

- apenas… ¡APENAS SE FUE AYER! ¡AYER!

- Bill…

- malditos inconscientes, eres un falso ¡un maldito falso!

- Bill, no hables así a tu padre.- dijo mamá un poco furiosa.

- ¡¿MI PADRE?!- saque una carcajada con sarcasmo. -¿mi padre? Gordon no es mi padre ¡no lo es! Papa no es un falso como Gordon, ¡por eso papá te dejo! ¡Jamás pensaste en el!

De un momento a otro mire el gran puño de Gordon acercarse a mi cara. Me paralice. De pronto sentí un terrible ardor en mi mejilla, la tome con ambas manos y mire a Gordon. Me miraba enojado.

- ¡no hables de tu madre así, no tienes que desahogarte de esa forma!- mire a mamá, ella no hacía nada, se quedaba mirándome.

- te odio, te odio, te odio ¡TE ODIO! ¡Los odio a los dos!

Salí corriendo a mi habitación, cerré la puerta echando el pestillo. Yosai comenzó a llorar fuertemente.

- ¡Cállate!- deje caer lagrimas, deje que el coraje inundara todo mi cuerpo.

Mis muñecas comenzaron a palpitar, mis brazos llenos de sangre era la única imagen en mi mente. Camine al baño y busque entre mis cajones algo que pudiera servir. Cuando me acorde que Tom había echado al piso el fierro.

Le busque por toda mi recamara hasta que le encontré. Me senté en el piso cogiéndola con una mano. La acerque a mi muñeca. Solo miraba el camino rojo que el fierro dejaba en mis brazos y la tranquilidad al hacerlo, suspire aliviado y cerré los ojos disfrutando de esto.

De pronto los sollozos de yosai se hicieron lejanos. Di unos cortes más, por alguna razón ya no sentía nada más que dolor, tristeza…soledad.

Me vire a mi brazo, con la intención de dar unos cortes más. Mi brazo estaba completamente rojo, la sangre salpicaba mi ropa y el piso. Mire el fierro, tenia un poco de sangre…mi sangre. La culpa me recorrió el cuerpo y mi subconsciente me recordaba repetidas veces: “solo la quieres ver morir sola”

Sola…soledad…sin nadie…¡Sola!

- ¡(TU NOMBRE) MURIO SOLA!- todo regreso a la normalidad.

Los sollozos de Yosai, ahora eran gritos desesperados, los gritos y golpes de mama, Gordon y Tom fuera de mi recamara, golpeando la puerta, se hicieron como  bombas que hacían que mi cabeza quisiera explotar.

Lagrimas salieron de mis ojos, tape mis oídos.

- déjenme, déjenme, déjenme, déjenme…- repetía, esperando que lo hicieran.

Escuche pequeños ruiditos, como un metal pegándole a otro. De pronto la puerta se abrió de golpe. Tom corrió y cargo a yosai.  Yo corrí al baño y tome papel higiénico para cubrir mi herida.

Tom se acerco y me miro el brazo. Sus ojos se hicieron cristalinos al ver toda la sangre traspasar el papel. Negó y jalo su cabello desesperado.

- yo ya no puedo…- un par de lagrimas recorrieron sus mejillas.

Sentí culpa, sentí decepción de mí, sentí alivio, sentí miedo, sentí toda clase de sentimientos en ese momento. Mire mi brazo y quite el papel de él, negué para mí mismo, ahora las había hecho tan profundas que no hubiera sido extraño mirar mi hueso salir.

[…]

- tu hermano me ha dicho que te has vuelto a cortar.- baje la mirada.

El saco un lapicero de su portafolio y junto a este, una pequeña libreta de piel café.

- creí, que habías comprendido que esto no está bien, Bill.

- nada está bien ahora…

- ¿por qué lo dices? Todo siempre tiene su lado positivo.

- ahora nada lo tiene…- decía cortante.

- Bill, recuerdo que me has dicho que tu novia no quería que té siguieras cortándote.

Yo asentí y mis ojos comenzaron a hacerse cristalinos.

- y solo porque se ha ido ¿lo harás otra vez?

- necesito hacerlo.

- no es verdad, tú mismo me dijiste que no querías que te dejara a ti, y a tu hija. Bill, tienes que seguir fuerte por tu hija.

- sin (Tu nombre) ya nada me importa…

- no digas esas cosas, Bill. Tu hija pronto crecerá ¿quisieras que ella sea igual que tú? ¿Qué se corte?

Trague pesado, realmente, John tenía razón, no quería que yosai tuviera un padre que se haga daño.

- no…

- ¿no qué?

- no quiero…no quiero que lo haga…- el sonrió con suficiencia.

- Bill, han pasado un mes. Sé que la quieres…

- la amo…- interrumpí.- mira, yo sé que esto es duro para ti, pero tienes que pensar en tu hija, en tu hermano. Que me haya hablado de nuevo me hace saber que en realidad se preocupa por ti.

Cerré los ojos, impidiendo que las lágrimas cayeran.

- le prometí…tantas cosas…

- ¿y las has cumplido?- deje que algunas lagrimas cayeran de mis ojos y negué.

- no del todo…

- ¿Qué te parece si hacemos un trato?

- …. ¿un trato?- John asintió.

- mira, quiero que después de que yo me valla. Vallas con tu novia, quiero que hables con ella, que te desahogues con ella y si es necesario, lleva a tu bebe, seguro ella también la extraña.

Cerró su libreta con el lapicero dentro y me miro sonriendo.

- quiero que cumplas esas promesas, que le digas cuanto la amas. Bill, siempre que necesites algo, ella va a estar ahí, solo háblale.

Mire sus zapatos negros, después le mire a los ojos. El sonreía, esperando una respuesta de mi parte. Suspire y mordí mis labios, después asentí.

- está bien…

- ¿me lo prometes?

- si…

…..

Terminamos de hablar, el se levanto y estrecho mi mano. Se fue, y yo aproveche para ir al cuarto de Tom por Yosai.

Tom le tenía acostada en la cama, hacia cosquillas en sus piecitos desnudos y Yosai reía como yo jamás le había escuchado. Me acerque a Tom, el aun sonreía y me pareció extraño que no quito su sonrisa a pesar de que me miro.

- yo…llevare a Yosai conmigo.

Tom se alejo de Yosai y asintió. Le cargo y la paso a mis brazos.

- gr…gracias.- intente sonreír pero no pude.

Camine hacía la puerta, después me vire con Tom, que aun me miraba.

- voy con…mi angelito.

- está bien.- sonrió.

- si quieres…puedes venir.

- yo te alcanzo, ¿está bien?- asentí.

Me di la vuelta y camine fuera de su recamara.

[…]

Me hinqué frente a la tumba de mi angelito y deje unas flores que le había comprado antes de venir.

- hola…linda.

Suspire y me senté en el pasto con Yosai en mi regazo.

- ¿sabes? Me he vuelto a cortar mis brazos…Bueno, seguro si me has visitado, lo sabes. Lo siento, pero es que me haces tanta falta…te extraño, linda y seguro que Yosai también.

Le he echado la culpa a Yosai por todo esto, y sé que hice mal…bastante mal, Tom y yo hemos vuelto a pelear, aunque yo siento algo extraño en el… John me ha dicho que él se interesa en mí, que me quiere…pero es que yo no le creo del todo, finalmente el es mi psicólogo y él sabe porque lo dice.

¿Sabes? He estado muy distante de Gordon y de mamá, desde hace un mes que no les hablo y es que Gordon me ha golpeado y mamá no hizo nada…realmente me sentí mal, pero es que yo también les grite.

Yosai comenzó a quejarse y le acaricie para que se calmara un poco.

- (tu nombre), John me ha dicho, que cumpla todo lo que te he prometido, y eso es lo que vine a hacer.

Este mes he conocido a alguien…se llama Mariane…ella…ella me ha apoyado estos días. No llevo mucho de conocerla pero, siento que puedo confiar en ella… (tu nombre)…te he prometido que reharía mi familia, que estuviera con otra mujer y enserio que lo he intentado…

Mariane y yo somos amigos…hace unos días ella intento besarme, realmente yo no sabía qué hacer, así que ella me beso. No le seguí el beso por más de medio segundo. Me sentí culpable…y me corte los brazos…

Con esto me di cuenta que yo…yo no estaré con alguien más…al menos no por mucho tiempo, y es que cuando miro a otras mujeres…nadie se te parece…nadie puede reemplazarte a ti…linda…nadie…

Saque las lagrimas de mi cara y respire hondo por un momento, hasta que me decidí por hablar otra vez.

- también te he prometido que le contaría a Yosai sobre cómo nos hemos conocido…y enserio que lo he intentado…pero he encontrado la vergüenza al hablarle… ¡Es nuestra hija! ¿Cómo podría tener vergüenza al hablarle? Pero la siento, porque este mes he estado solo llorando y haciéndome daño, Tom la protege de mí. Y le encuentro lógica la razón por la que lo hace…he sido duro con ella…y es apenas una bebe. Será que le contare como nos conocimos cuando tenga el corazón para contárselo y ella lo tenga para guardar esa historia como el mayor tesoro.

Hermosa, ese día, tu me has prometido que terminarías de leer el libro…me he quedado con las ganas de mirar el final y seguro tu tambien ¿no es así? Asi que decidí que no lo leería hasta venir contigo. Espero que no te importe que le haya tomado de su lugar.

Abrí el libro, donde estaba el separador que ella había puesto.

“El abrió el sobre, dentro de ella, se encontraba una hoja color amarillo muerto.- ¿de quién será?- se preguntó al mirar la letra de la carta.Después de pasarle los ojos por todo aquel papel, comenzó a leerla.

Querido stan:

Seguro te estás preguntando quien soy. Pues te contestare la pregunta, soy rugen. Conozco a july, ella es mi hermana. Llego conmigo hace unos años, ella lloraba. Me platico que había conocido al amor de su vida y lo amaba, su nombre es stan ¿lo conoces? Ella me dijo que tubo que dejarte, ella se encontraba muy triste.
Seguro ella no te lo había contado, pero ella sufre de una enfermedad: “Adenomatosis y Pólipos intestinales” su enfermedad no tiene cura. Para mí es muy difícil decirte esto, stan. Pero ella ha fallecido. Apenas llego al hospital y se nos ha ido…mi hermana se ha muerto.
Te escribo esta carta, porque siendo su novio, tienes todo el derecho de saber qué es lo que le ha pasado. Seguro que ahora tienes una novia o seguro esposa, pero esta carta la tenía que mandar.Bueno, stan. Ahora nos dirigimos al velorio, espero entiendas que no fue fácil para ella irse, alejarse de ti, pero al llegar aquí ella me dijo que lo hacía porque te amaba.

Hasta pronto.

Mis lagrimas comenzaron a inundar mis ojos…mi july se había ido…para siempre.”

Las lagrimas ya habían salido de mis ojos…era…era tan extraño.

- bueno…es el final… (tu nombre)…

Este libro me había dejado con un hueco en el estomago. ¿Cómo podía haber un final tan triste? Yo creía en los finales felices…un beso de amor, pero….¡la muerte de alguien!

- (tu nombre)…yo no quiero que nuestra historia acabe solo así…te amo…también….también te he prometido que…que no te iba a dejar sola…que siempre íbamos a estar juntos….pero…

By Tom

- por favor… (Tu nombre)….regresa….regresa…no me dejes solo….no puedo vivir sin ti….regresa…déjame te miro una vez más…quiero ver tu carita…quiero, quiero ver tus ojitos…quiero escuchar tu voz… ¡¡ no me dejes solo!! Linda…regresa….

Bill lloraba incontrolablemente, no se había dado cuenta de que yo estaba parado atrás de él.

- por favor…

Le abrace, el salto asustado y me miro y respondió el abrazo.

- Tom…¿por qué me dejo?....porque no se pudo quedar mas conmigo…era mi angelito…yo la amaba, Tom…¿Por qué me dejo...? Yo no quería que esto terminara así….

- así son las cosas, hermanito.

- ella significa mucho para mí…es la única que he amado

- lo sé, sé que es duro para ti, se que la amabas pero ¿sabes? Tienes que sonreír por los recuerdos hermosos que tuvieron.

- quiero estar con ella…ya no creo en el amor…ya no creo en los milagros.

- ambas cosas existen, solo tienes que confiar, Bill.- negó.

- si los milagros existieran…quisiera que mi linda regresara… que nunca se hubiera enfermado…y que todo empezara de nuevo…sin ningún error.

- Bill, con esto ya no podemos hacer nada, llevas un mes llorándole a (Tu nombre), pidiendo que regrese, date por vencido, ella no regresara.

- ¿Por qué existe la muerte? Porque las personas que más queremos tienen que morir…las personas que amamos…

- es el ciclo de la vida, Bill…tarde o temprano todos vamos a morir...

- quisiera regresar el tiempo…jamás haberle dicho groserías…Tom, iba a dar la vida por mi…y yo…yo aquí estoy….vivo…ella está muerta ahora…¿Por qué? ¿Por qué no pude dar la vida por ella?

-ven, hermanito.- le abrace fuertemente.

- tom, te quiero….perdóname por todo…

- no me pidas disculpas bill, ahora tu estas mal, no necesitas pedirlas, siempre te voy a perdonar todo…

- ella me dijo que yo estaría mejor sin ella….pero no es verdad…la extraño, Tom…la extraño…

- yo también la extraño…pero Bill, tienes que seguir por yosai…tienes que seguir…no quiero que te rindas, por favor, hermanito, yo te quiero volver a ver feliz….quiero que volvamos a ser los de antes…pero no podemos si no vuelves a sonreír…ya no te cortes…ya no..

Me abrazo fuertemente, yo le estreche entre mis brazos. Realmente quería que Bill fuera el de antes…sé que no volverá a ser el mismo…pero quiero que sonría…como antes…

Nos quedamos ahí por unas horas, hablando con (tu nombre)…bill no paraba de llorar.

Después decidimos regresar a casa….